Renault impulsa los vehículos eléctricos en Argentina; manejamos el Twizy

Renault Argentina realizó este martes con la prensa especializada una jornada de test drive e introducción a los vehículos eléctricos en el stand que tiene en la feria Tecnópolis, en Villa Martelli.

El evento consistió en un breve repaso a la gama Z.E. o Zero Emissions (cero emisiones) del rombo, la cual ya se comercializa en Europa y que empieza a coquetear con su llegada a otros continentes, como es el caso de la región de América Latina.

El evento contó con la participación del propio presidente de Renault Argentina, el francés Thierry Koskas quien como comentamos al momento de su designación (ver nota), cuenta con una importante experiencia en la materia, puesto que fue durante tres años el Director del Programa de Vehículos Eléctricos de la compañía.

El Twizy en la Argentina
Ya habíamos visto de cerca el biplaza Twizy en el Salón de Buenos Aires -en su versión “de carrera”- y también hace pocos días en el stand de Renault en Autoclásica 2013, pero en esta ocasión pudimos conocerlo más en detalle y hasta manejarlo.

Lo más interesante fue conocer parte de la historia del simpático benjamín de la familia Z.E., contanda por el propio Koskas, padre de la criatura. “El Twizy no nació de una manera normal, fue una creación que se realizó de manera oculta en un galpón”, confesó el francés en su breve exposición. Y Cosas de Autos dialogó con el directivo para conocer más acerca de esta “romántica” iniciativa.

-¿Ud. participó directamente del desarrollo de este modelo?
-Sí, claro. De los tres vehículos que forman parte de la gama Z.E.: Twizy, Kangoo y Fluence.

-¿Cuánto tiempo demandó el desarrolló del Twizy “en las sombras”?
-No mucho realmente, estimo que unos cinco meses aproximadamente. Claro está que el producto final no era así como lo vemos hoy, era mucho más feo, con una estructura de caños a la vista, sin carenados. El desafío fue importante porque había que mostrarlo de esa manera.

-¿Y fue el propio Carlos Ghosn, CEO de Renault-Nissan, quien lo aprobó?
-Sí, se lo mostramos, decidió subirse y probarlo por sí mismo y de inmediato quedó encantado por la experiencia. Nos dio su aprobación y dijo que debíamos llevarlo a producción.

-¿Más allá de lo estético aquél protoptipo difería mucho de este Twizy que tenemos acá?
-No, era bastante parecido en su funcionamiento. Es un auto divertido de manejar, a mí me gusta mucho.

Koskas no oculta su orgullo frente a este modelo y se divirtió como un chico manejando unas tres o cuatro veces el Twizy en el mini-circuito que se levantó en las calles desiertas de Tecnópolis; incluso se dio el gusto de exceder la velocidad permitida para los periodistas y hacer rechinar los neumáticos Michelin en las curvas, ante el grito nervioso de sus pasajeras de turno, las colaboradoras del área de Comunicación de Renault Argentina.

Al volante
La experiencia es extraña pero uno se acostumbra de inmediato. No hay más que quitar el freno de mano y apretar un botón (que oficia de palanca de velocidades) y ponerlo en D (Drive) para que el Twizy esté listo para salir ni bien se pisa el acelerador. Cuenta con tracción trasera y la transmisión es automática (con directa y reversa).

La dirección es algo dura porque carece de cualquier tipo de asistencia, y la suspensión algo rígida, pero le otorga buena estabilidad.

Con sólo levantar el pie del acelerador, comienza a frenar porque no recibe energía, pero si se pisa el freno entran en funcionamiento los frenos de disco, presentes en las cuatro ruedas; la energía liberada por esa acción es aprovechada para cargar las baterías de litio-ion, ubicadas debajo del piso.

Tiene cinturones de seguridad para conductor y pasajero, cuenta con airbag frontal, el tablero de instrumentos dispone de velocímetro e indicador de batería, hay un interruptor de luces, de baliza y un sistema de conexión vía Bluetooth para que, mediante el celular u otro dispositivo, se pueda reproducir música. En el frente, debajo de una tapa, se oculta el enchufe mediante el cual se lo puede cargar en cualquier toma de energía; la recarga completa se realiza en tres horas, aproximadamente.

Mide 2.330 mm e largo; 1.190 mm de ancho y 1.460 mm de alto. Es más que una moto y menos que un city car. El conductor viaja sentado y cubierto, aunque no hay ventanillas que protejan de las inclemencias del tiempo. Detrás de la butaca principal (corrediza) hay otro asiento (en tándem) como para que vaya un pasajero o bien se pueda llevar algo de equipaje de mano.

La versión que probamos cuenta con un motor eléctrico que alcanza un potencia máxima de 18 hp y un torque neto de 57 Nm, disponible desde el momento que uno pisa el acelerador. Llega una velocidad máxima de 80 km/h y tiene una autonomía estimada de 100 km en ciclo urbano. En Europa hay una versión menos potente que no sobrepasa los 45 km/h y que se puede conducir -desde los 15 años- sin necesidad de tener licencia habilitante.

En el Viejo Continente se comercializa desde 5.500 euros y hay una línea de accesorios para equiparlo y personalizarlo.

En Argentina el uso de este vehículo está prohibido debido a que no está homologado ni entra en ninguna categoría existente. Sólo hay en el país estas dos unidades de Twizy que probamos pero la familia Z.E. se agrandará en breve con la llegada a fin de año de dos unidades del ZOE y del Kangoo.

El ZOE Z.E. es un hatchback eléctrico de cinco puertas que alcanza una potencia de 88 hp y 220 Nm de torque, con una interesante autonomía de 210 km en ciclo combinado.

La Kangoo Z.E. es un vehículo liviano de carga con portón corredizo lateral y acceso trasero que también puede ser usado para llevar hasta cinco pasajeros debido a sus múltiples configuraciones. Alcanza una velocidad máxima de 130 km/h y una autonomía de 170 km en ciclo combinado. Ya está siendo usado por diferentes empresas europeas, como las compañías de correo, y en la Argentina hay varias firmas interesadas en sumarse a la fase de test con miras a incorporar este vehículo a sus flotas.

La gama Renault Z.E. completa.

¿Twizy feito no Brasil?
En otro claro guiño hacia América Latina, Renault anunció hace pocas semanas que ensamblará 32 unidades del Twizy en Itaipú, Brasil, centro de desarrollo de vehículos eléctricos del país vecino. Serán los primeros Twizy en ser armados fuera de la planta de Valladolid, España donde se fabrican desde su lanzamiento en 2011.