“Las condiciones meteorológicas anunciadas para mañana (por hoy miércoles), con altas posibilidades de neblina hasta el final de la mañana, no nos permiten respetar los horarios previstos para la jornada.
Con lo que la carrera se convertirá en una etapa de enlace que llevará a los participantes desde Chile hasta Argentina a través del puerto de atraviesa la Cordillera de Los Andes.
En consecuencia, la Especial 11 (Copiapó – Fiambalá) será anulada. Y los participantes partirán hacia Fiambalá a partir de las 8:00 am.”
Así comunicó la organización su decisión de anular la etapa de hoy y darles un respiro a los participantes después de un martes durísimo en el que, además del vuelco de Terranova, el hecho saliente fue el accidente del motociclista Cristóbal Guerrero. El español se cayó de su KTM y quedó en estado de coma a causa de un edema cerebral. “Es un paciente comprometido y con riesgo vital”, afirmaron los organizadores vía comunicado.
“Dios quiera que termine este primer Dakar. Podré entonces pensar en volver”., había declarado Guerrero, de 48 años, antes de iniciar la competencia. El ruego ahora es por su salud.
“Hay mucho piloto suicida” en este Dakar
“No han matado a más motociclistas porque no era el día. Del Dakar de Argentina me quedo con el público y no con el comportamiento antideportivo”, declaró. Josep Nicolás González, quien abandonó el Dakar la semana pasada tras ser embestido duramente por un camión. Como muestra la foto, su camioneta quedó partida al medio, sin la caja, a causa del impacto, aunque ni González ni su navegante, Ignasi Bosch, sufrieron lesiones.
“En África hay mucho más espacio. Aquí en las pistas he vivido el peligro en mis propias carnes. Hay mucho piloto suicida. El día del accidente no veíamos nada, aminoramos la marcha y de repente dimos dos vueltas de campana. Tuvimos mucha suerte porque el coche acabó de pie. Nos paramos y salimos, no sabíamos qué había ocurrido y el público nos dijo que un camión nos había arrollado por detrás. No se pararon y se escondieron detrás de unos árboles”, relató González al diario El País de España.
“Se está llegando al límite de jugar con la vida de los participantes. Una cosa es el sufrimiento y otra jugar con la vida de los pilotos. Se tendría que alterar el orden de salida, las motos salen las primeras aunque al final de la etapa los coches y los camiones cogen a las más rezagadas. Habría que alargar más la salida entre unos y otros para correr sin peligro”, agregó el piloto de la Toyota Hilux 407.