“¿Cómo es posible?”, se preguntaba Carlos Sainz luego de ver cómo quedó su Volkswagen Touareg después de caer en un río seco aparentemente mal señalizado en el km 79 de la especial del día. El español, que era cómodo líder de la prueba y había ganado seis de las diez etapas, tuvo que abandonar la carrera porque su navegante, Michel Perin, sufrió una lesión en uno de sus omóplatos. “No podíamos verlo. Las ruedas delanteras se fueron al hueco, volcamos hacia adelante y quedamos sobre el techo. Frené pero no pude parar”, declaró el bicampeón mundial de rally.
El accidente pudo haber sido más grave si alguno de los autos que lo seguían de cerca caían sobre el de Sainz, algo que estuvo a punto de suceder en dos ocasiones, hasta que una camioneta de la organización señalizó el lugar.
“El Dakar no se gana hasta que se termina. Esto era un ‘de más’ en mi carrera automovilística, que ya está hecha. Si no ocurría algo así, seguramente íbamos a ganar la competencia”, dijo Sainz quien no sabe si tomará parte de la prueba el año que viene sobre todo porque la participación de Volkswagen está en duda.
El estadounidense Mark Miller, compañero de equipo del español, se impuso en la etapa, aunque el líder ahora es el sudafricano Giniel de Villiers, también con VW, que lidera cuando restan tres etapas.
Por su parte, el argentino Marcos Paronelli volvió a ganar otra etapa del Dakar y marcha segundo en la clasificación general de los cuatriciclos, detrás del checo Josef Machacek.
El accidente de Carlos Sainz desde el aire
España habla de la “mala pata” Sainz
La mala fortuna de Carlos Sainz es algo que lo acompañó en varias definiciones a lo largo de su carrera deportiva y todos los medios ibéricos hicieron una revisión de los antecedentes en este sentido.
1989: A falta de dos tramos para adjudicarse su primer título mundial de rally, Sainz rompió la transmisión y sufrió su primer abandono.
1991: La junta de la tapa de cilindros de su Toyota Celica se quemó y no pudo revalidar el título que había conseguido en 1990.
1994: La frase de Sainz “La cagamos, Luis” dio la vuelta al mundo. Eso fue lo que le dijo a Moya al salirse del camino en la última etapa delrally de Gran Bretaña y quedar fuera de la pelea por el campeonato.
1997: En el rally de Nueva Zelanda se le cruzó una oveja y tuvo que abandonar cuando era serio aspirante a la corona.
1998: A falta de 500 metros, su auto se detuvo en el rally de Gran Bretaña y perdió la última opción de volver a coronarse como campeón del mundo. “Trata de arrancarlo, Carlos, ¡por Dios!”, fue el hit de Moya que recorrió todos los canales de noticias.
2003: En el rally de Argentina un error de su copiloto Marc Martí le costó una penalización y la victoria.
1 comentario
Es una prueba muy dificil, hay que estar muy bien equipado y preparado.