Este domingo, la Renault 2.0 corrió en Potrero de los Funes, San Luis su última competencia del año y definió su campeón de la temporada pero lejos estuvo de ser noticia por esto. Una bochornosa definición de la carrera y el título opacó el cierre del trabajo de decenas de chicos que compiten en la principal categoría formadora de la Argentina, por la cual han pasado la gran mayoría de los pilotos que hoy corren en TC, TC2000, TRV6 y otras.
La polémica sobrevino a falta de un giro, cuando Franco Vivian lideraba la carrera sin sobresaltos y se encaminaba al título. En ese momento, a falta de una chica, el puntero fue embestido por su inmediato perseguirdor, Kevin Icardi, y ambos perdieron posiciones: Icardi llegó tercero y Vivian cuarto.
La carrera fue ganada por Franco Girolami pero poco importó, lo importante fue que Vivian no ganó y esto le posibilitó a Nicolás Trosset, quinto en pista, sumar los puntos necesarios para alzarse con una corona que de no ser por ese desenlace, se le hubiera escapado. Vale recordar que Icardi y Trosset son compañeros de equipo en el Werner Plan Rombo, uno de los tantos teams de la categoría pero con la diferencia que cuenta con patrocinio de la propia marca organizadora.
Toques de carrera, malas maniobras, errores involuntarios… Todo esto puede pasar, pero en una categoría que hace las veces de divisiones inferiores, donde se debe aprender a competir (a ganar y a perder) se deberían extremar los recaudos para no exponer a los pilotos que en definitiva siguen siendo chicos. Ya tenbdrán tiempo de aprender lo malo, la intención es que aprendan lo bueno.
Renault expresó su disconformismo
A través de un comunicado de prensa, Renault Sport expresó su total desacuerdo con la definición que tuvo el campeonato de la Fórmula Renault 2.0, “teniendo en cuenta que la forma en que se coronó al nuevo monarca de la especialidad es totalmente contraria al espíritu con el que Renault Sport invierte en el automovilismo deportivo”, señaló.
“La situación que definió el título a favor de Nicolás Trosset, quien no tuvo participación alguna en dicha situación, perjudica la imagen de una categoría que históricamente se ha caracterizado por formar deportivamente a los jóvenes pilotos de la Argentina y Sudamérica”, amplió.
De esta manera, la automotriz deslinda responsabilidades al ser sponsor del equipo Werner Plan Rombo, principal involucrado en la maniobra antideportiva que acabó con las chances de Vivian y que le permitió la consagración a Trosset, sobrino de Norberto Fontana.
“A través de este comunicado Renault Sport también pretende dejar expresado que la participación de Plan Rombo como sponsor principal del equipo Werner Plan Rombo, sólo corresponde a un auspicio publicitario que persiguió la jerarquización de los jóvenes talentos y en nada una intromisión deportiva ni oficialización alguna de dicha escudería”, puntualiza.
Seguramente la marca no querrá ver manchada su imagen y evitará nuevos patrocinios, al menos eso se desprende del final del comunicado: “La situación generada sin lugar a dudas provocará un total replanteo por parte de Renault Sport de cara al futuro de la categoría, de la misma forma que esperará y acatará las sanciones que correspondan ante una maniobra que merece la total reprobación de la compañía”.
