Es un simple comercial de TV, una de esas jugarretas publicitarias que se develan recién al final pero que reflejan muy bien el presente. En su comercial institucional “Casamiento”, Volkswagen Argentina -a través de su agencia Fischer América– juega con una situación verosímil de dos jóvenes que parecen alistarse para celebrar su casamiento por civil.
Se los ve saliendo de sus casas para lo que parece ser un día muy importante, juntarse en el camino, llegar juntos al lugar, recibir la charla amigable de parte de alguien que está del otro lado de un escritorio, poner la firma y -finalmente- celebrar con un beso antes de… recibir las llaves de su auto 0 km.
Más allá del cierre del comercial con el sobreimpreso (que dice “Un Volkswagen es para siempre”) la situación demuestra una realidad bien de este momento de la Argentina: comprar un 0 km. es el máximo evento al que puede aspirar una persona una pareja joven.
La falta de crédito hipotecario a tasas accesibles, la imposibilidad de ahorro en otras monedas y la depreciación del peso a manos de la inflación contribuyen a que cada vez más personas piensen en “refugiarse” en un auto nuevo. Lamentablemente, el auto pasó a ser el bien más importante (sino el único) al que pueden acceder muchas personas.
Y si no, vean las parejas que esperan detrás de los novios para repetir la misma operación y que en un primer momento simulan ser los testigos.
3 comentarios
Muy cierta la lectura entre lineas… que triste realidad nos toca vivir en esta dictadura disfrazada de democracia.
Totalmente cierto, el auto es el casi el único bien al que se puede aspirar. un 2 ambientes va a ser un lujo, no hablemos de una casa
La propaganda es malisima, la culpa, seguramente la tiene el gobierno…