El 30 de junio pasado, Ford Motor Co. anunció oficialmente la partida de su presidente y CEO, Alan Mulally, quien a los 68 -según había dicho la automotriz- había puesto “fin a su carrera”, tras 8 años en la compañía.
En su reemplazo, la marca del óvalo nombró a Mark Fields, de 53, quien se desempeñaba como Jefe de Operaciones y pasó por todas las áreas de la compañía, incluyendo el desarrollo de producto, la manufactura, las ventas, el marketing y el servicio.
Pero lejos de jubilarse e irse a pescar, Mulally volvió a ser noticia hoy y dio la “sorpresa” de la jornada: Google anunció que lo sumó a la Junta Directiva de su empresa.
Sí, el gigante de la web y la tecnología se movió rápido y se aseguró los conocimientos del hombre que implementó el plan One Ford y le permitió al gigante de Detroit capear la tormenta, salir de la crisis sin ayuda estatal (como GM) ni de alianzas (como Chrysler) y potenciarse a nivel global.
“Alan trae una riqueza de experiencia demostrada en liderazgo empresarial y la tecnología”, dijo este martes Larry Page, CEO de Google, en un comunicado. “Estoy muy contento de que Alan se sume a la Junta directiva de Google”, agregó.
“Me siento honrado de formar parte de la junta directiva de una empresa emblemática a nivel mundial que se dedica a la mejora de nuestras vidas”, expresó Mulally en un comunicado.
Un nuevo desafío
El desembarco de Mulally en Google tiene un doble impacto: en primer lugar porque su nombre había sonado con fuerza para sumarse a Microsoft, debido al vínculo que el especialista en software forjó con Ford.
Y en segundo lugar porque sabido es el interés de Google en desarrollar el auto autónomo (ver nota) y en la aplicación de software para vehículos sobre sistema operativo Android, y ahí es donde la experiencia del ex mandamás del óvalo puede pesar y mucho.
Prototipo del primer Google Self-Driving Car Project.
