Seguramente muchas veces hemos escuchado hablar sobre el octanaje de los combustibles. Para muchos es algo incomprensible y para otros es un número casi mágico que define la carga o no de un tipo de combustible. Pero, ¿sabemos concretamente qué es el octanaje y qué función tiene?
Entre sus propiedades, la nafta debe cumplir con un número correcto de octanos debido a que de ser incorrecto hace que el combustible detone antes de tiempo en el motor. Esta detonación es lo que normalmente conocemos como “pistoneo”, algo que no sólo puede generar una pérdida de potencia sino daños al motor.
¿Cómo se obtiene un número alto de octanos? En Ensenada, partido de La Plata, YPF cuenta con una de sus tres refinerías del país, donde -mediante procesos de refinación de alta tecnología- se obtienen naftas con el más alto número de octanos, sin utilizar aditivos metálicos que pueden alterar el funcionamiento de los motores.
Bajo el microscopio
Para entender qué son los octanos, debemos comprender los procesos físico- químicos que se dan en la combustión. Hagamos de cuenta que estamos de visita: nos ponemos por un momento el casco y los anteojos de seguridad y el guardapolvo blanco para atender a la definición técnica de YPF.
Cuando una molécula presente en la composición de una nafta inicia el proceso de combustión, es decir, que comienza a quemarse, primero necesita “romperse” en dos para que de esa manera el oxígeno pueda combinarse con ese fragmento de molécula y así generar la ignición.
Lo que define la resistencia a romperse de las moléculas en la nafta es, fundamentalmente, su “forma”. A continuación, dos ejemplos de algunas de las moléculas que se podrían encontrar en la nafta que utilizamos diariamente.
¿Qué diferencias tienen a simple vista? La distinción que cada una posee respecto de la otra es la forma en que se enlazaron esos átomos al momento de formar cada molécula. La característica principal del Isooctano es su menor tamaño, ya que es compacto, menos expandido. Mientras que el N-octano es una extensa cadena lineal.
Podríamos comparar a estas moléculas con ramas de árbol y deducir que por la forma que tiene cada una, sería más fácil quebrar la “rama” N-octano que la Isooctano.
¿Qué importancia tiene la forma? Es muy importante que estas moléculas tengan un alto grado de dificultad para romperse, ya que cuando se comprime la mezcla de aire-nafta, las moléculas no se incendian y esperan a que la bujía les “ordene” cuándo deben empezar la combustión.
También, las moléculas deben estar ramificadas, parecidas o iguales al Isooctano, ya que la resistencia que tienen permiten que la combustión sea progresiva. De otra manera, ocurrirían explosiones violentas, más conocidas como detonaciones, que producirían, a largo plazo, daños en el motor.
Gracias a los procesos de última tecnología de las refinerías de YPF, se elaboran naftas mediante procesos especiales que permiten tener un control estricto sobre la forma de las moléculas que componen la nafta. Así se evita el uso de un aditivo basado en el metal Manganeso para mejorar la capacidad antidetonante de la nafta, pero que tienen consecuencias adversas a largo plazo.
¿Qué es la sigla RON?
Al abrir la tapa del depósito de combustible de nuestro auto es probable que veamos la sigla “RON” que puede resultarnos insignificante, al menos hasta ahora. Veamos, existen dos condiciones perfectamente definidas de número de octano, ambos muy importantes:
-RON (Research Octane Number o Número de Octano de Investigación): que se mide en la condición del motor haciendo poner en marcha el vehículo desde su estado en reposo.
-MON (Motor Octane Number o Número de Octano Motor): que se mide en la condición del motor haciendo un esfuerzo extra para sobrepasar un vehículo en la ruta.
Cuando usualmente se escucha hablar del número de octano de una nafta, se está haciendo referencia al RON. Normalmente nadie habla del MON aunque está claro que también es un parámetro muy importante que no se debe descuidar.
YPF diseña naftas cuyos valores octánicos se encuentran entre los más altos del mercado, por encima de los estándares requeridos por las normas internacionales y las automotrices. Los combustibles que desarrolla la compañía potencian la eficiencia y la vida útil del motor, sin descuidar el medioambiente ya que generan menores emisiones contaminantes y mayor rendimiento.
