En la madrugada argentina de este miércoles, Renault India presentó en Chennai nada menos que nuevo compacto global low cost, al que bautizó Kwid. Ni XBA ni Kayou, como se especulaba horas antes. Se trata del hijo más reciente del diseñador holandés Laurens van den Acker y el nombre deriva precisamente del concept que se dio a conocer el año pasado en el Salón de Nueva Dheli, y del que toma también algunas líneas.
El Kwid interesa de este lado del mundo porque es el primer auto desarrollado sobre la plataforma CMF-A del grupo Renault-Nissan, lo que le permitiría ser producido en diversos mercados.
La automotriz señala que se trata de una plataforma “extremadamente flexible” y que “como resultado, el estilo exterior y el tren de potencia se puede variar significativamente con el fin de que coincida con los requisitos y las preferencias específicas de los clientes en los mercados internacionales”.
Por el momento será sólo para el mercado indio, donde la marca del rombo sale a la caza de modelos muy instalados y exitosos como son Hyundai i10 y Maruti Alto. Y lo hace con una propuesta interesante de diseño y una política de precios agresiva.
“El nuevo modelo se adapta a las necesidades específicas de los mercados como la India y le permitirá a Renault seguir adelante con el despliegue de su estrategia de expansión internacional”, consigna el comunicado oficial.
Fue desarrollado no sólo en India sino conjuntamente en otras tres sedes que Renault tiene alrededor del mundo: Francia, Japón y Corea. Los Centros de Diseño de Brasil y Rumania, no participaron, aunque esto no quiere decir nada.
Está a la vista que el Kwid es un hatch compacto de cinco puertas, alto y con aires de mini SUV. La idea de aparentar lo que no es (o de ser un crossover) es precisamente lo que buscó Van den Acker, vice-presidente Senior de Diseño Corporativo de Renault.
“A primera vista, el Kwid combina un diseño emocional con la necesidad de tranquilidad expresada por los clientes. Sus líneas de SUV reflejan su fortaleza y carácter robusto y sostiene una mirada distintiva y moderna”, argumentó.
Mide 3.68 m de largo y 1,58 m de ancho, con un despeje del piso de 180 mm, en el que se destaca una alta posición de manejo.
En el interior se visualiza una propuesta similar a la de otros modelos de la marca, con el uso de Piano Black y con la incorporación del sistema MediaNav (pantalla táctil multimedia de 7″ con GPS).
Como para que nos ilusionemos con un producto que podría ser tranquilamente el sucesor del Mío, Renault no dice una palabra sobre el Mercosur pero sentencia que el “Kwid es un fuerte ejemplo de las ambiciones de crecimiento de Renault en los mercados internacionales”.