El Papa Francisco recién tiene previsto visitar la Argentina en 2017, según confirmó esta semana el encargado de ceremonial y protocolo del Vaticano, su amigo el monseñor Guillermo Karcher. Sin embargo, hay quienes ya se ilusionan con su llegada, entre los que podemos citar a los directivos de la filial local de Toyota.
“Ya estamos trabajando para que el Papamóvil que use Francisco en Argentina sea un Toyota”, nos dijo este miércoles Eduardo Kronberg, gerente e Responsabilidad Social de Toyota Argentina. “Tiene que ser una Nueva Hilux blanca, cabina simple…”, se entusiasmó Kronberg, quien se interesó además por el contenido de la nota en la que dimos cuenta del papamóvil que se usará en Cuba (ver nota), y lamentó que no haya sido un Toyota, como fue el caso de Bolivia (ver nota).
¿Una expresión de deseo nomás? No, el vínculo entre la marca y la Iglesia está cada vez más estrecho, y parte de eso tiene que ver con su rol en RSE. Repasemos: desde su nombramiento, Steve St. Angelo, CEO de Toyota para América Latina y el Caribe, se mostró como un confeso admirador de Francisco y el año pasado se dio el gusto de conocerlo personalmente en un viaje junto al presidente de Toyota Argentina, Daniel Herrero.
Papa Francisco junto a St. Angelo y Herrero en septiembre de 2014.
Fue en el marco de una visita a Roma en la que la automotriz refrendó ante el Santa Padre el acuerdo de cooperación que tiene con Scholas Ocurrentes, una entidad educativa con sede en Vaticano (impulsada por el propio Papa), que vincula la tecnología con el arte y el deporte para fomentar la integración social y la cultura del encuentro por la paz.
Desde entonces, Toyota ya sacó el tema en conversaciones informales con altos representates de Scholas, quienes incluso se interesaron en el Salón de Buenos Aires 2015 en el prototipo de la Hilux para escuelas rurales, exhibido en el stand, y diseñado por José Luis Denari.
Y hay más: quienes recientemente estuvieron cerca de St. Angelo y de José María del Corral, director mundial de Scholas Occurrentes, señalan que entre ambos hubo un desafío mayor que quedó flotando en el aire: desarrollar el primer papamóvil amigable con el medio ambiente. ¿Llegarán a hacerlo realidad para 2017?
