El presidente Mauricio Macri está en China para participar del foro “Una Franja y una Ruta para la Cooperación Internacional” junto al presidente Xi Jinping y otros mandatarios. A muchos les sorprendió el vehículo en el que se trasladó el primer mandatario argentino, por tratarse de una silueta poco reconocible. Al menos para el mundo occidental.
¿De qué auto se trata? Faros redondos, parrilla recta cromada, ruedas de 20″, laterales limpios y planos… ¿Un Chrysler? ¿Un Bentley? ¿Un Rolls Royce? Quizás el ojo encuentre rasgos de algunos modelos de estas marcas, sin embargo no se trata de ninguna de ellas.
Estamos ante el Hongqi L5, un modelo original chino que es el elegido por ese país para las visitas protocolares.
Hongqi es la marca de autos más antigua de China y desde 1958 se dedica a los vehículos de lujo. Luego de años complicados, a fines de los noventa pasó a manos del grupo FAW -automotriz con participación estatal- que la devolvió a la vida inspirada en los clásicos modelos del pasado, como el CA72.
El CA770 (conocido como Dongfeng CA72) fue el primer modelo de Hongqi el cual estaba -como es costumbre en las marcas orientales- basado en un auto ya existente; en este caso se desarrolló sobre la plataforma del Chrysler Imperial, y estaba equipado con un motor V8 de 200 cv.
En este primer modelo se introdujo la parrilla cromada con barras verticales que -dicen- estuvo inspirada en un tradicional ventilador.
Hoy como ayer, Hongqi es la marca elegida para agasajar por los presidentes que visitan China. Y el L5 se viene luciendo en eventos protocolares desde hace cuatro años, incluyendo la Cumbre de G20 de 2016, que incluyó la participación de los veinte presidentes de los países que representan el 85% de la economía mundial.
¿Qué características tiene el L5? Su diseño es moderno pero de corte netamente retro, manteniendo un frente que homenajea al CA72 de 1958. A decir verdad no llega a ser una limousina pero mide 5.555 mm de largo y tiene una distancia entre ejes de 3.435 mm, lo que garantiza un buen confort interior con 1.140 mm de espacio para las piernas.
Para mover los 3.150 kg que pesa cuenta con un motor V12 de 6 litros que entrega una potencia de 402 cv @ 5.600 rpm y alcanza un torque neto de 550 Nm @ 4.000 rpm, asociado a una caja automática-secuencial de seis marchas y con tracción en las cuatro ruedas inteligente permanente. Se dice que el chasis es de una Toyota Land Cruiser y que el motor podría ser Mercedes-Benz, pero esto último no está comprobado.
En su interior tiene detalles de lujo como asientos de cuero ventilados y calefaccionados, eléctricos y con hasta 8 memorias; detalles laquedados (10 opciones disponibles); pantalla táctil multimedia de 13,5″; pantalla trasera de 8″ + monitores en los apoya-cabezas y equipo de sonido BOSE hi fi con 15 parlantes.
Así y todo hay que decir que el L5 es la versión compacta del Hongqi L9 que ostenta 6.395 mm de largo y 3.900 mm de distancia entre ejes. Y que tiene puertas con apertura tipo “suicida”, como el Rolls-Royce Phantom.
Las ventas de los modelos de Hongqi se realizan a través de la contratación pública y se facturan como “el auto oficial para los funcionarios ministeriales”. Cosas que pasan en China. El L5 tiene un precio que ronda los u$s 580.000.-
Dato: Hongqi quiere decir “bandera roja” en chino, por ende el emblema de la marca cumple con esa premisa. Y por eso la marca fue, desde siempre, la que movilizó a las máximas figuras del partido comunista.
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