Prácticamente en cada muncipio de todas las provincias del país hay un depósito de vehículos secuestrados y abandonados a la espera de que se decida su destino. ¿Cuántos son? ¿Qué se puede hacer con ellos?
Según el ministerio de Seguridad de la Nación más de dos millones de unidades a lo largo del país están en condiciones de ser compactadas. Se trata del parque vehicular judicializado que ha sido evaluado y puede convertirse en chatarra, material que tiene un valor aproximado de $1.500 millones, que bien podrían ser destinados a obras de bien público.
Complementariamente, la Justicia podría disponer que algunos de los vehículos sean destinados a la lucha contra el crimen o bien como material didáctico para la enseñanza técnica a estudiantes secundarios.
Para lograr esto, el ministerio lanzó el sistema del Registro Nacional de Vehículos Secuestrados (RENAVESE), dependiente de la Secretaría de Seguridad de la Nación. El registro funciona dentro de la estructura del Programa Nacional de Compactación (PRONACOM) que regula los procesos de descontaminación y compactación de vehículos secuestrados.
“La cantidad para comprimir es dinámica porque el circuito no para: se secuestra todo tipo de vehículo y, si no se compactan en los tiempos que uno espera, el stock crece. El sistema no lo soporta. Si se saca una foto hoy, a nivel país se puede estar hablando de dos millones”, declaró Rodrigo Bonini, subsecretario de Investigación del Delito Organizado y Complejo, a la agencia de noticias Télam.
Según un relevamiento del RENAVESE, los municipios de casi todo el país tienen un conflicto grave con sus espacios de custodia debido a que los predios destinados al alojamiento de vehículos secuestrados están colapsados.
“En un predio de 100 m2 pueden estar bien alojados unos 50 vehículos, pero el acopio a cielo abierto produce contaminación ambiental y, además, con el colapso de los lugares se generan conflictos sociales debido a que hay ocupación del espacio público, se producen incendios y hay actos de vandalismo con los que se nutre de autopartes ilegales el mercado de repuestos”, expresó Damián Raboso, jefe del RENAVESE.
