A pesar de que la economía argentina manifiesta temblores producto de la devaluación y la inflación, la industria automotriz sigue -de momento- mostrando cifras positivas en lo que va del año.
La Asociación de Fábricas de Automotores (ADEFA) dio a conocer el informe de julio del cual se desprende que la producción de vehículos alcanzó las 41.450 unidades, un 5,1% más respecto de junio anterior y un 8,6% comparado con el desempeño del mismo mes de 2017 (38.169 unidades).
En el acumulado enero-julio 2018, la producción fue de 284.105 unidades, un 9,8% más respecto de los 258.823 vehículos que se fabricaron en el mismo período del año pasado.
Por el lado de las exportaciones, en el séptimo mes del año se enviaron al exterior 25.363 vehículos, un 10,8% más respecto de junio, y un 74,7% respecto del volumen registrado en julio de 2017.
En lo que va del año, el sector exportó 146.933 vehículos, lo que arroja un crecimiento del 30,1% en comparación con las 112.943 unidades que se enviaron a diversos mercados en el mismo período del año pasado.
En ventas mayoristas, el sector comercializó a la red de concesionarios 46.637 unidades durante julio, un volumen que significa un retroces del 15,8% respecto de junio y del 35,5% por debajo del mismo mes de 2017.
De esta forma, en lo que va de este año se comercializaron a la red un total de 468.244 vehículos, lo que significa una baja interanual del 4%.
Luis Fernando Peláez Gamboa, presidente de ADEFA opinó que “nuevamente, los números del mes dan cuenta que es necesario analizar el comportamiento del sector en dos niveles muy diferentes. Por un lado, el desempeño industrial, y por otro el comercial”.
“Centrándonos en los principales pilares industriales, hemos notado una mejora tanto en producción como en exportaciones. Respecto de esto último, desde el inicio del año, se viene registrando un aumento de los despachos a Brasil y se traduce en un crecimiento de 6 pp en este período”, afirmó Peláez Gamboa. “La tendencia registrada en Brasil -agregó- se suma también a la creciente demanda de nuestros vehiculos en diferentes mercados de Latinoamérica y América Central”.
Este comportamiento se traduce en un avance de la participación de las exportaciones totales sobre los volúmenes de producción de 43% a 52% comparado los primeros siete meses de 2017/2018.
“Por el lado de la comercialización, las variaciones en el tipo de cambio y la tasa de interés, que aún se mantiene muy alta, han tenido un fuerte impacto sobre las ventas de vehículos, situación que esperamos se regularice y permita volver a un mercado interno que crezca en el menor plazo posible”, expresó el directivo.
Resulta interesante un reclamo de ADEFA para mejorar la competitividad: “Debemos continuar el camino de trabajo que se viene realizando en conjunto con los ministerios de Producción, Transporte, secretaría de Modernización, Aduana y otros organismos, en la simplificación de los procesos y la mejora continua de la competitividad y que ya cuenta con resultados concretos. Por caso se puede mencionar, entre otros ejemplos, la eliminación del peritaje de los vehículos al momento de la importación o la implementación de trámites electrónicos y a distancia en más de una docena de procesos y ante diferentes organismos del Estado (INTI, DNRPA, Senasa, etc.)”