Hacía mucho tiempo que demandábamos un modelo de la marca japonesa mediano con silueta hatchback y no lo teníamos, porque Corolla no ofrece una versión sin baúl en América Latina, y el Etios nos resultaba muy chico y con un diseño anticuado (que en realidad nació viejo).
Es cierto que ya habíamos probado el primer Yaris que llegó al país importado desde Tailandia y nos había gustado con varios “peros”: con un diseño sobrio y muchos faltantes de equipamiento, sobre todo en seguridad. Ahora nos encontramos ante una nueva variante reinterpretada, hecha en Brasil, que nos ha dejado satisfechos.
Por fuera
Esta versión S luce deportivo pero se lo percibe como tal, a pesar de que no ofrece un plus mecánico respecto de las otras versiones menos equipadas. Sus detalles específicos son visibles desde el exterior con una parrilla negra, y una línea rojo en el frente, en los espejos retrovisores y sobre el portón trasero. A esto le suma -en esta versión- la incorporación del techo solar eléctrico, un elemento muy buscado.
Sus medidas son: 4.145 mm de largo; 1.730 mm de ancho y 1.475 de altura con una interesante distancia entre ejes de 2.550 mm que garantiza no sólo una buena habitabilidad trasera (aunque aptas sólo para dos adultos) sino que además contribuye a un comportamiento dinámico óptimo.
Se presenta moderno y a simple vista no parece un producto Mercosur sino “importado”. Tiene una línea bien proporcionada, una mínima caída de techo (algo que le da buen espacio para las cabezas) y que remata en un alerón y un pilar C en negro, cerrando una silueta atractiva.
El frontal claramente le da una nueva identidad a la marca, afortunadamente mucho más cercano a Corolla y Camry que a Etios, y con una parte posterior muy bien resuelta, limpio, sin necesidad de invadir el portón ni el paragolpes para ubicar el porta-patente.
A bordo
A diferencia de su homónimo tailandés, este Yaris Mercosur tuvo una correcta configuración; cuenta con una buena dotación en materia de confort y seguridad de serie, y una calidad de materiales y terminaciones que supera las expectativas.
¿Ejemplos? La plancha, que si bien no es soft touch tiene muy buen aspecto, con detalles cosidos, al igual que en el caso del volante multi-función, de muy buen grip y pespunteado en rojo haciendo juego con el tapizado de los asientos, que están forrados en cuero perforado.
También la inclusión de detalles en Piano Black en la consola central y en los revestimientos internos de las puertas, que suman símil cromados. Por otra parte, resulta simple encontrar una correcta posición de manejo (y como acompañante) gracias a que ambas butacas cuentan con regulación en altura, con impecable sujeción lateral, al margen de que la columna de dirección sólo se puede regular en profundidad.
Asimismo, hay algunas cuestiones que no nos agradaron tanto. ¿Cuáles? Una -que no es menor- tiene que ver con los reflejos que genera el cristal que está por delante de los relojes; en diferentes momentos del día se genere un brillo por acción del sol que impide casi totalmente la lectura de la computadora de a bordo y de los instrumentos.
Otro punto que no nos gustó es la ubicación de la central multimedia (de escasas 7″) debido a que el ingreso del rayo de sol de manera cenital también le genera un reflejo que impide su visualización. Este elemento, además, no incorpora navegador satelital ni sensores de estacionamiento.
Algunos detalles mejorables: faltan lugares porta-objetos, por ejemplo, para poder dejar de manera cómoda y segura el celular; el apoya-brazos central no es corredizo, lo cual hace que quede por detrás del cuerpo y sirva apenas para ubicar el codo; la guantera no tiene luz ni cerradura y su calidad es inferior al del resto del conjunto; también es mejorable el piso del baúl y su correspondiente bandeja colgante; carece de luz de lectura para las plazas traseras.
Dentro del equipamiento mencionamos que incluye climatizador automático (de una zona); cámara de visión trasera; sensor crepuscular y de lluvia; acceso y arranque sin llave; puerto USB dentro del apoya-brazos; control de velocidad crucero; cierre centralizado; espejos retrovisores eléctricos y plegables; alza-cristales eléctricos one touch; apertura del portón desde el interior (no desde el control remoto).
A favor y en contra: el baúl redujo su capacidad respecto del tailandés, pero el neumático de auxilio es homogéneo (Dunlop Enasave en medida 185/60 R15, aunque con llanta de chapa).
Al volante
A priori la mecánica (que es la misma del Etios) nos sembraba dudas acerca de si iba a poder mover con soltura a un vehículo de mayor tamaño. Sin embargo, nos ha causado una excelente impresión, sobre todo en su asociación con la transmisión automática-secuencial del tipo CVT, de siete marchas, con levas al volante.
Hablamos de un cuatro cilindros, 16v de 1.5 litros con tecnología Dual VV-Ti que entrega 107 cv @ 6.000 rpm y un torque neto de 140 Nm @ 4.200 rpm. Claramente por el tipo de caja y su relacionamiento está más enfocado en cuidar el bolsillo que en la performance, pero se muestra ágil en la diaria y también cuando se lo exige.
El confort de marcha es agradable en todo tipo de uso, tanto en ciudad como en ruta y hasta en algún camino roto de tierra. Tiene un muy buen seteo de suspensión, con recorridos bien ajustados a nuestras calles y caminos, sin acusar golpes ni rolidos excesivos. Y a alta velocidad se comporta muy firme en correlato con dirección eléctrica que transmite seguridad. Lo que no podemos dejar de marcar es que los bajos tocan bastante al pasar por cunetas o lomos de burro.
En lo que respecta a consumos mostró cifras muy lógicas: a 100 km/h acusó 6,2 l/100 km a un régimen de 2.700 rpm; a 120 km/h fue de 7,2 l/100 km a 3.200 rpm, y a 130 km/h se elevó apenas a 8,1 l/100 km y giró a 3.500 rpm. Sin embargo, los 42 litros de capacidad que ofrece el tanque de combustible limitan la autonomía.
Cabe resaltar que ahora viene con Control de Estabilidad (VSC) y Tracción (TRC), de serie, así como Asistente al arranque en pendientes (HAC), y en el caso de esta versión -tope de gama- incluye siete airbags. Todo esto además de los frenos con ABS y distribución electrónica de frenado, y el asistente de frenado de emergencia, así como los ganchos ISOFIX para las sillas de niños.
Conclusión
Toyota ha acertado en la decisión no sólo de producir este modelo en la región sino en la configuración que ha elegido. La oferta de Yaris tiene varias versiones y es interesante como alternativa a los medianos compactos, en un mercado que parece focalizar sólo en los SUV.
Reúne un diseño atractivo, una mecánica confiable (con posventa económica por tratarse -además- de un motor cadenero) a lo que se le suma el VSC de serie, lo cual conforman un combo para considerar.
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DISEÑO
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MECÁNICA
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SEGURIDAD
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EQUIPAMIENTO
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COMODIDAD