A los 88 murió el diseñador y empresario de la modas Paco Rabanne. A lo largo de su carrera, el español mostró una fuerte atracción con el mundo de los autos y fiel a su estilo transgresor, buscó la forma de combinar ambos mundos.
La mayoría tendrá presente los comerciales de TV de los perfumes One Million, Lady Million y Olympea en la que aparecen jóvenes con poca ropa, cuerpos esculturales y autos clásicos de lujo; hay espacio para que se luzcan algunos Jaguar E-Type y un Lamborghini Miura blanco.
Sin embargo, el vínculo entre los autos y este innovador creador fue mucho más allá, por lo que -a modo de homenaje- nos propusimos nombrar los más salientes y sin dudas más de uno se sorprenderá.
-Colección rob’auto. A mediados de la década del 60, Paco Rabanne se encontraba experimentando con diversos materiales que hasta entonces parecían ajenos a la moda como papel, metal martillado y cuero tricotado. En ese marco creó una colección de pret-a-porter a la que llamó “Rob’auto”, diseñada especialmente para manejar.
-Calandre. Para 1969 se propuso lanzar al mercado su primer perfume femenino, el cual tenía englobar una serie de condimentos muy particulares.
El desafío para el perfumista Michel Hy fue que la fragancia tenía que evocar un escenario concreto: a orillas del mar, con una música romántica sonando de fondo, una pareja hace el amor sobre el capó de su auto, después de haber pasado todo el día recorriendo la Costa Azul. ¿Cómo hacer para recrear los olores de los cuerpos de dos amantes, del metal del capó caliente y del entorno natural?
Según se indicó luego, el amor fogoso y el calor del auto se interpretan a través de las notas florales aldehídas (jacinto, muguet y rosa), que junto con las notas verdes y la bergamota, proporcionan la nota metálica, que mezcla -al mismo tiempo- un poco de amargor y cremosidad.
Las notas florales son trabajadas como un bouquet verde, fresco y rosado, que se combina con los aldehídos dotando al perfume de una extraordinaria modernidad. El fondo, amaderado, seco y empolvado gracias al iris, remite a un “chypre” ligeramente almizclado.
Y acá viene el corolario: Paco Rabanne decidió llamar a este perfume Calandre, cuyo significado en francés no es otro que “parrilla de auto” (sí, la parrilla que está en el frente de los coches). Poco femenino quizás pero fue un suceso que se transformó en un emblema y que fue copiado por otras marcas.
-Paco Rabanne Racing Team. Pocos recordarán que la marca fue sponsor principal de un equipo del Campeonato Francés de Producción que se quedó con el título en 1986 de la mano del piloto Xavier Lapeyre con un Audi 200 Turbo Quattro que llevaba esa publicidad en sus laterales. También fue subcampeón en la temporada siguiente.
-Junto a Maserati. En 2010, Maserati y Paco Rabanne decidieron unir fuerzas para hacer un evento que exudara exclusividad. El lugar elegido no fue Roma ni Milán, en Italia sino el Motor Village de París, Francia, el punto de marca del Grupo Fiat en los Campos Elíseos. El modisto expuso sus creaciones y algunos de sus recordados looks, mientras que la marca del tridente sus últimos autos y también algún guiño a su rica historia.
El por entonces nuevo GranTurismo MC Stradale y el GranTurismo MC Trofeo Race Car compartieron espacio con el 300 S de 1955, y con esbeltas modelos vestidas con icónicos vestidos, incluido el hecho con discos de aluminio que usó Audrey Hepburn en la película “Two for the road” (1967).
-Junto a Garage Italia. Para la Navidad de 2016, Paco Rabanne no tuvo mejor idea que lanzar una promoción tan simple como efectiva: quien comprara uno de sus perfumes estaría automáticamente participando del sorteo de un Fiat 500. Pero no era cualquier Cinquecento sino uno especial: casi totalmente dorado, como el envase símil lingote de oro del perfume One Million y Lady Million.
La realización del mismo estuvo a cargo de Garage Italia, la firma de personalización de autos creada por Lapo Elkann, nieto de Gianni Agnelli, y parte del grupo automotor creado por su abuelo; fue expuesto en el centro de Milán y atrajo miradas, flashes y muchas compras.
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