La noticia recorre los principales medios de Brasil: la filial local de Peugeot está siendo investigada por posible evasión de impuestos en la reventa de autos de lujo, importados como si fueran activos de la propia fábrica. Se habla de una cifra cercana a los R$ 30 millones, unos $50 millones.
El portal G1 señala que más de 900 unidades de la última versión del modelo 407 ingresaron a Brasil con impuestos reducidos por haber sido declarados como para uso de Peugeot en el territorio nacional, y que sólo podían ser revendidos después de un plazo de 5 años, algo que no sucedió. ¿El caso les suena a uno conocido con diplomáticos en el medio?
El proceso corre por cuenta de la Justicia Penal de Paraná, debido a que algunos de los vehículos fueron revendidos en aquel estado brasileño, aunque hay registros de ventas a otros estados. Los compradores finales se sometieron a un período en el cual el auto continuaba a nombre de la automotriz para no llamar la atención en la transferencia para el nuevo propietario.
PSA Brasil emitió un comunicado oficial en el cual afimra que “todas las operaciones realizadas por la empresa en Brasil, inclusive las de importación, siguen las normas y procedimentos legales”. “Continuamos colaborando, dentro de una filosofía y práctica de total transparencia seguidas por la empresa en sus actividades en el país, con la disponibilidad de todas las informaciones solicitadas. Esperamos así, esclarecer rápidamente todos los puntos levantados durante la operación”, informa G1.