(Cosas de Autos en Villa Gesell). Nunca vimos tantas RAM juntas y en un escenario más propicio para demostrar sus cualidades. Hasta este balneario de la provincia de Buenos Aires viajamos en el marco de la presentación oficial de la nueva RAM 2500 (ver nota), que se dio en la presentación oficial del relanzamiento de la marca en la Argentina.
El Off Road Park, un circuito permanente (estable todo el año) para vehículos todoterreno del Grupo Chrsyler fue el lugar elegido por los directivos de RAM para recibir a un importante grupo de prensa especializada que llegó por tierra y por avión para darse el gusto de conocer, tomar contacto y manejar las únicas full size pick-ups del mercado local en un auténtico parque de diversiones para adultos.
No sólo pudimos recorrer el predio -que ahora se amplió a 26 hectáreas con más de 30 obstáculos- en compañía de un piloto (en nuestro caso una mujer piloto), sino también manejar y descubrir por nosotros mismos el confort de marcha de semejantes moles de 6 metros de largo.
A su vez, participamos de una incursión por los médanos del sur de Villa Gesell donde fuimos los únicos espectadores de un show de acrobacias de motocross, jet ski y wakeboard, todo atentamente vigilado y registrado desde un helicóptero acondicionado para el evento, a orillas del mar.
Pasado, presente y futuro
Lucas Ramírez, gerente comercial de Chrysler Argentina, hizo las veces de anfitrión y repasó la historia de RAM en la Argentina, marca que en 2004 se lanzó localmente como parte de la división camionetas de Dodge, con el modelo Quad Cab (Cabina y media) con motor diesel Cummins de 5.9 litros.
“En 2009 se decidió que RAM fuera una marca aparte por tratarse del único fabricante del mundo especializado en camionetas, algo que es un diferencial”, remarcó Ramírez. Hasta ese entonces, se habían comercializado en el país menos de 1.000 unidades anuales, con récord en 2008 con unas 900 pick-ups, unas 500 en 2009 y unas 400 en 2010.
Por diferentes motivos, la marca RAM no tuvo ventas entre 2011 y 2012 y volvió en 2013 con el lanzamiento en septiembre de la versión RAM 1500 Laramie con el motor naftero Hemi V8 de 5.7 litros, alcanzando la comercialización de unas 200 unidades. El carnero había vuelto.
Hace pocas semanas, RAM concretó el anhelado regreso de la motorización diesel Cummins de 6.7 litros, esperada por quienes usan el vehículo no tanto para el lifestyle sino para quienes precisan de su impresionante capacidad de trabajo. Desde la compañía confían que encontrará su nicho y acompañará el crecimiento y desarrollo de la marca.
“Estimamos comercializar a lo largo de 2014 un total de 1.500 unidades, con un mix de 200 unidades de la versión 2500 Turbo Diesel y el resto de la 1500 Nafta”, nos confió Lucas Ramírez. “Por otro lado, por equipamiento, confort y precio, nuestro objetivo también es competir en la parte alta del segmento de las mid size pick-ups”, amplió. Mensaje para la Toyota Hilux, la Volkswagen Amarok y la Ford Ranger, que vienen liderando el segmento.
¿Quién es el cliente de RAM? Nos lo respondió el Ing. Marcelo Durañona, responsable de Logística y Producto de Chrysler. “El público de RAM es todo aquel que siente ganas de ir a buscar desafíos, de practicar deportes extremos, deportes vinculados al motor, más allá de un uso de trabajo. Por las características de nuestras pick-ups, apuntamos a un público no tan tradicional”.
-¿Cuál es el diferencial de una marca como esta?
-No sólo somos la única marca de full-size pick-ups sino que nuestros productos tienen un diseño totalmente nuevo respecto de lo que es el resto de la oferta. En el último tiempo el diseño de las pick-ups que se comercializan en el país se ha ido asemejando y RAM viene a romper el paradigma, con un diseño imponente.
Todo esto sin dejar de lado un gran nivel de equipamiento de confort y seguridad como son los asientos tapizados en cuero con calefacción y ventilación, equipo de sonido de alta fidelidad Alpine con pantalla táctil de 8,5″, navegador satelital incorporado en el caso de la RAM 2500 y próximamente también en la 1500, seis airbags, Control de Estabilidad y Tracción y sistemas de Mitigación de rolido y de Oscilación de remolque, entre muchos elementos.
-¿A esto se le suma la posibilidad de accesorios?
-Sí, las posibilidades de accesorizar una RAM con la línea de accesorios Mopar es infinita: hay desde estribos hasta capós, ganchos de remolque, llantas… La unidad que exhibimos en este predio es sólo un ejemplo de lo que se puede hacer.
-¿Más allá del motor, cuál es la principal diferencia que marcás entre la 1500 y la 2500?
-La suspensión. Si bien hay que destacar que ambos modelos cuentan con un sistema de suspensión con resortes, y no con elásticos como el resto de la pick-ups, la RAM 1500 tiene un comportamiento totalmente distinto, que en cualquier terreno se asemeja al de un auto.
Con 6 metros de largo, la RAM 2500 es más grande, más alta y ancha, y más pesada, por lo que su andar -si bien es muy bueno- cambia respecto de la 1500 y seguramente lo habrás comprobado.
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Efectivamente lo probamos y nos sorprendimos. Nunca antes nos habíamos subido a una RAM y manejarla en la arena, en pendientes, en vados de un metro de agua y viajando tanto al volante, como acompañante o en las plazas traseras, fue una experiencia inédita. Más allá de que no tiene rivales en el mercado podemos afirmar que la RAM, en cualquiera de sus versiones, se parece poco y nada a una pick-up.
Fabricadas en México, la RAM 1500 tiene un precio de u$s 59.000 y la RAM 2500 de u$s 73.100, lo cual las convierte en vehículos de nicho pero competitivos respecto de los que buscan una pick-up de lujo o que quieren “algo más” que un SUV 4×4.
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