La firma de ropa rag & bone decidió para su más reciente campaña crear un video clip en el que se destruye un Porsche 911 con un bloque de hormigón. Dicen por ahí que el auto en cuestión no tenía su mecánica pero, a juzgar por lo que se llega a ver, su estado era más que bueno tratándose de un clásico muy buscado.
Más de uno hubiese invertido contento varios miles de dólares en restaurarlo y disfrutarlo en lugar de cometer semejante aberración en pos del “arte”.
Polémica instalada
Salvando las diferencias, los defensores de los derechos de los animales juntaron firmas y escracharon a un dentista estadounidense que asesinó a Cecil, el león más famoso de Zimbabwe, bien se podría hacer lo mismo con los que destrozaron una joya como un 911.
Por lo pronto, en las redes sociales de rag & bone ya hay quienes sumaron sus fuertes críticas y plantean que en lugar de haber gastado dinero en hacer una campaña “cool” podrían haber hecho las fotos sin romper el auto y luego subastarlo con fines benéficos.
Otros, en cambio, insultan a la marca diciendo que el “911 es eterno” mientras que la moda de rag & bone “es una m….”.
Seguramente no calcularon el precio de haberse metido con un ícono de la historia de automóvil que trasciende, incluso, las barreras de esta industria.
Datos
La firma rag & bone suele contratar a celebridades como Winona Ryder, Kate Moss y Emile Hirsch para promocionar sus creaciones y realiza campañas de gran impacto visual.
La modelo que aparece en este video es Gabriella Wilde, una inglesa de 26 años que también trabaja como actriz y tuvo apariciones en distintas películas y en un par de series de TV.
Según el diccionario de la Real Academia Española (RAE), la definición de “sacrilegio” es: lesión o profanación de cosa, persona o lugar sagrados. A nuestro juicio se ajusta perfecto para el título de esta nota.
