El presidente de la Nación, Mauricio Macri convocó este miércoles a la Casa Rosada a los miembros del sector automotor para suscribir un acuerdo tendiente a producir un millón de vehículos y generar 30 mil puestos de trabajo directo y 150 mil empleos indirectos de acá a 2023.
Específicamente, el acuerdo apunta a alcanzar las 750 mil unidades en 2019 y un millón en 2023, al tiempo que se analizará la carga tributaria en toda la cadena de producción, la utilización de biocombustibles y los reintegros a las exportaciones, entre otras medidas.
El acta de acuerdo fue suscripto por el ministro de Producción, Francisco Cabrera; por el titular de ADEFA, Luis Ureta Sáenz Peña; por el gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti; por AFAC, Raúl Amil; por ADIMRA, Gerardo Venutolo; por los gremios de SMATA, representado por Ricardo Pignanelli y UOM, a través de Raúl Torres.
Macri señaló que se trata del segundo gran acuerdo sectorial,después del suscripto por Vaca Muerta, en la Patagonia y destacó que se logró por la “madurez alcanzada”, en el entendimiento que esta herramienta fue por consenso. Y resaltó que el acuerdo se cerró gracias a la aprobación de dos leyes en el Congreso: la de PYMES y la de autopartistas.
Con la presencia de los representantes de todas las terminales que producen vehículos en nuestro país, el gobierno nacional expuso que tomará el compromiso de mantener operativa la Ley de Autopartes; brindar financiamiento específico para el desarrollo de inversiones en el sector autopartista y establecer un nuevo marco arancelario para la comercialización de vehículos híbridos y eléctricos.
La intención es aumentar la integración de autopartes producidas localmente a 35% para 2019 y llevar ese porcentaje al 40% en 2023, y diversificar los mercados de exportación, con el fin de vender al menos un 35% de la producción a destinos extra Mercosur.
Para lograrlo, se avanzará en las negociaciones para la apertura de nuevos mercados y analizar posibles acciones sobre las etapas de comercialización para optimizar el proceso de formación de precios al público; la diversificación de las exportaciones busca evitar la dependencia que la Argentina tiene del mercado brasileño, adonde envía el 80% de sus ventas al exterior.
En lo referente al empleo se realizarán cursos de capacitación y la promesa de disminuir el ausentismo al 5% para 2019 y al 3% para 2023, junto con la creación de 30 mil nuevos puestos de trabajo.
Las partes también se comprometerán a desarrollar inversiones, que según el titular de la UOM, Antonio Caló, alcanzarán los u$s 3.500 millones, pero en “fuentes oficiales” hablan de hasta u$s 5.000 millones, hasta el 2019, especialmente orientadas a la producción de vehículos nuevos y exclusivos.
“Históricamente la industria automotriz ha sido una actividad con gran peso en la producción, las exportaciones y el empleo del país pero producto de los cambios políticos económicos en la región es necesario recuperar el posicionamiento perdido. Este acuerdo y el compromiso del trabajo conjunto permitirá emprender el camino hacia la recuperación”, sostuvo Ureta Sáenz Peña, titular de ADEFA.
En su cuenta de Twitter, el ministro Cabrera sintetizó los objetivos del acuerdo firmado este miércoles y enfatizó: “Argentina tiene una gran tradición en la fabricación de autos: queremos autos mejores, más seguros, más baratos y con más piezas nacionales”.