En momentos donde todas las marcas sólo parecen pensar en lanzar modelos que apunten a satisfacer las necesidades de los clientes en un solo formato, el de los SUV, de todos los tamaños, Fiat “pateó el tablero”. Desarrolló para el Mercosur dos modelos “tradicionales”: un hatchback y un sedán compacto. Sí, un sedán, un cuatro puertas convencional, un auto con baúl, un nicho que casi parecía estar en desuso.
Y a ambos los dotó de líneas interesantes y detalles deportivos, inspirados en modelos globales. Nos referimos al Fiat Argo y en particular al Fiat Cronos, el cual probamos en su variante de entrada de gama: Drive 1.3.
Como dato duro pero no menos interesante vale mencionar que el 70% de la carrocería del Cronos fue desarrollada especialmente para este modelo, es decir que sólo comparte un 30% con Argo.
A bordo
Estamos ante un auténtico exponente del segmento C1 (según Fiat), un auto de 4.3 metros de largo con una distancia entre ejes de 2.5 metros con sus tres volúmenes bien marcados, lo que significa que hay buen espacio en plazas delanteras y sobre todo para las piernas en las traseras (no tanto para la cabeza), así como un baúl generoso (punto imprescindible en un sedán).
La capacidad del compartimento es de 525 litros, la mayor ante sus rivales directos, y con una boca amplia que permite ingresar cualquier tipo de equipaje o bulto, sin bisagras invasivas o que dañen la carga.
Baúl de buena capacidad y boca con 525 litros para llevar de todo.
El neumático de auxilio se guarda bajo el piso del baúl y es similar a los otros cuatro, un Pirelli P1 en medida 185/60 R15 pero con llanta de chapa y no de aleación; son opcionales en esta versión y le quedan muy bien por su diseño.
Cuando anteriormente nos referimos a detalles deportivos nos referimos al frontal del Cronos, con una trompa lanzada, con un capó con líneas bien marcadas, faros envolventes y una parrilla que se combina con una generosa entrada de aire inferior generando un efecto de boca que llama la atención.
La trompa del Cronos remite a los genes italianos de otro sedán europeo, el Tipo.
El remate posterior está bien logrado, con una caída de techo pronunciada que termina en una tapa de baúl con un spoiler incorporado.
Un remate muy bien logrado, con alguna reminiscencia de Alfa Romeo.
Traducido: a pesar de ser un sedán tradicional tiene ingredientes que le dan una apariencia de un segmento superior, independientemente del uso que se la vaya a dar (que en este caso puede que sea una herramienta de trabajo).
En el interior se perciben elementos comunes a la identidad del resto de la familia Fiat, con terminaciones más que correctas y una calidad percibida que es muy buena, más aún considerando que estamos ante la versión de entrada.
El volante es multi-función tiene buen grip sin presencia de cuero (en la tope de gama sí se ofrece), plancha de plástico (no soft touch) y con insertos en plástico gris símil aluminio cepillado.
En tanto los comandos del aire acondicionado son simples, con tres perillas, pero están bien resueltos, y se complementan con cinco salidas de aire (tres centrales y dos laterales).
Los relojes son analógicos de fácil lectura y con serigrafía deportiva, con medidores digitales de temperatura de agua y de combustible; se agrega en el centro la computadora con display de 3,5″ (en otras versiones es de 7″).
En el centro del tablero se ubica la central multimedia Uconnect es táctil de 7″ compatible con Android Auto y Apple Carplay que tampoco es de serie sino un opcional; es la misma que en otros modelos (como Argo y Toro).
La unidad que probamos corresponde a la versión Drive con Pack Conectividad.
¿Qué le falta al Cronos en esta versión? Que algunos elementos sean de serie y que se le agreguen otros como control de velocidad crucero (sólo en la versión tope), regulación en profundidad de la butaca del conductor, faros anti-niebla delanteros (opcional), que el sistema multimedia sume cámara de retroceso y que agregue GPS para no depender del Google Maps o Waze del celular.
En cambio destacamos que ofrezca de serie algunos elementos como los cuatro alza-cristales con one touch, volante multi-función, sistema “My Car Fiat” y “Follow Me Home”, monitoreo de presión de neumáticos y espejos retrovisores con luz de giro.
Al volante
Debajo del capó se guarda el motor naftero Firefly de cuatro cilindros, 8v y 1.3 litros de 99 cv @ 6.000 rpm de potencia y 130 kgm @ 4.000 rpm de torque. Está asociado a una caja manual de cinco marchas que resulta precisa y bien escalonada.
Casi 100 cv salen de este moderno motor 1.3 sin turbo y de sólo 8 válvulas.
Uno a priori pensaría que es un motor “chico” para un auto de semejante porte y 1.136 kg. Sin embargo responde correctamente y sin una rumorosidad excesiva. En el tránsito urbano es donde mejor se desenvuelve, con una buena respuesta “de abajo” si se lo sabe llevar al régimen adecuado, mientras que en ruta a más de 100 km/h es donde recién se evidencia la necesidad de una sobre-marcha para que el motor viaje más relajado.
La dirección cuenta con asistencia eléctrica lo cual permite gran facilidad de maniobra en estacionamiento y con un buen radio de giro.
Caja manual de quinta para esta versión 1.3 Drive. Le cae bien pero una sobremarcha le iría mejor en ruta.
El confort de marcha es un aspecto saliente ya que la suspensión no denota golpes y su andar es sereno en empedrados y pavimento deteriorado. También merece un punto aparte su despeje que le permite pasar cualquier tipo de cuneta o lomo de burro sin roce alguno.
Por el lado del consumo registramos las siguientes cifras: a 100 km/h transita a un régimen de 3.000 rpm y acusa 17,5 km/l, mientras que a 120 km/h lo hace a 3.200 rpm y nos dio 13,4 km/l. A lo largo del contacto promedió un total de 11,8 km/l, lo que puede marcarse como positivo.
En cuanto a seguridad hay que decir que de serie el Cronos cumple con lo mínimo: incorpora doble airbag frontal, frenos de disco delanteros (traseros a tambor) con ABS y EBD, ganchos ISOFIX para sillas de niños y cinturones de tres puntos y apoya-cabezas para los cinco ocupantes.
A partir del nivel Precision le suma el Control de Estabilidad (ESC) y Tracción (TC), los anti-niebla y, recién la versión con caja automática le incorpora los airbags laterales delanteros.
Respecto de algunos rivales como Volkswagen Virtus y Toyota Etios sedán, el Cronos corre en desventaja al no ofrecer el ESC de serie y cuatro airbags, y al no poder optar por sumarlo en algún Pack, sin dudas que esto le impedirá alcanzar las cinco estrellas de Latin NCAP, aunque Fiat aún está a tiempo de reaccionar.
Conclusión
Es un sedán muy bien logrado que, según la versión y conjunto motor-caja elegido, puede ser tanto una herramienta de trabajo como el auto de una familia tipo; la variante Drive 1.3 es una excelente alternativa para aquellos que le den un uso principalmente urbano.
No resigna diseño en pos del confort, y cumple con lo que se le demanda a un vehículo de tres volúmenes, aunque le pedimos un poco más de seguridad.
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DISEÑO
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MECÁNICA
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SEGURIDAD
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EQUIPAMIENTO
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COMODIDAD
