Sin carteles: la imagen, tomada este jueves, muestra la retirada de Geely de su local de Vicente López.
Como se dice en la jerga, Geely Argentina “bajó los carteles”. Desde hace algunas horas, la marquesina de su casa central ubicada en Avenida del Libertador 390 ya no luce los logos, ni las vidrieras los ploteos: restan apenas unos días para que se retiren los autos y cierre sus puertas.
Inaugurada en mayo de 2019 (ver acá), la sede corporativa de más de 2.200 m2 de oficinas y 400 m2 de showroom insignia hacía meses que había quedado grande para los pocos empleados que la llevaban adelante, y muy distante de las oficinas de Montevideo, desde donde se comandan las acciones.
¿Cuál será el futuro de la marca china en Argentina? Se decidirá en poco tiempo más, por ahora las operaciones (administrativa, comercial y posventa) se mudan a una oficina en CABA.
Fiancar debe decidir y no errar más
Los Lempert, la familia uruguaya que comanda el reconocido Grupo Fiancar del otro lado del Río de la Plata, deberá decidir si sigue o no al frente de Geely en Argentina. Las últimas devaluaciones y los cambios en los “impuestos al lujo” parecen haberle dado el golpe de gracia a una marca que no para de crecer a nivel global pero que nunca terminó de afirmarse en nuestro país, un poco por los cambios en las reglas de juego y otro tanto por malas decisiones.
Entre esas malas decisiones se puede contar, por ejemplo, la de hacer un evento de lanzamiento en diciembre de 2016 con un presentador uruguayo, pasando por la importación de modelos que estaban de salida como el LC, hasta la del propio alquiler de semejante local en Vicente López.
El showroom modelo y sede de Geely Argentina se inauguró en mayo de 2019. En ese espacio antes habían estado las oficinas de Toyota y Nissan, respectivamente.
En las próximas semanas Richard Lempert viajaría a China para reunirse con directivos de Geely y analizar la viabilidad de seguir apostando a nuestro país. Precisa algo más que apoyo, necesita producto nuevo y a precio competitivo si quiere superar este mal momento y salir a flote a futuro.
Hoy los concesionarios tienen sólo dos modelos por debajo de la línea del impuesto: el sedán Emgrand 7 y la versión de entrada del crossover GS; las variantes más equipadas de GS y las X7 quedaron fuera de competencia respecto de otras opciones del mercado.
Entonces, ¿cómo es posible que actualmente se consigan unidades de GS a $1 millón y de X7 Sport por $1.4 millones? Porque son unidades MY 2018, de viejo stock que está remanente en varios puntos de venta de la red.
Son excelentes oportunidades para quien cuente con el dinero; los concesionarios los ofrecen -incluso- con ventajas como los servicios bonificados. Y si no cuentan con el color o la versión requerida, se lo piden a otros colegas, ayudándose entre todos.
Varios dealers achicaron sus estructuras a la espera de novedades, y de momento la marca sólo informó el cierre de su representante en Pilar.
Así le fue en 2019
A lo largo de 2019, Geely patentó 311 unidades, muy por debajo de la caída del mercado. Fue un retroceso del 64,5% respecto de 2018, cuando comercializó 876 vehículos.
De todos modos, sin lanzamientos ni novedades, así como sin un modelo “de volumen”, podría decirse que el desempeño anual de Geely no fue malo; claro que esas cifras no alcanzan para sostener una red de concesionarios y talleres a nivel nacional.
¿Cómo les fue a sus competidores chinos en 2019? BAIC patentó un total de 245 unidades; JAC, 275; Lifan 550 y Chery 2.011; todas cayeron menos JAC que en su primer año con porfolio completo logró crecer un 192,6%
Richard Lempert, responsable del Grupo Fiancar, representante de Geely en Argentina.
¿Qué pasará con Geely en Argentina?
Si los Lempert no logran que los chinos se involucren apostando en invirtiendo en la Argentina, la marca quedará sin representación a la espera de que algún otro importador se quiera hacer cargo del parque circulante y de la red. Por la posventa no habrá que preocuparse porque la misma familia representa a Geely en el Uruguay.
El modelo X3, un SUV compacto que se viene prometiendo hace tiempo (ver acá), podría ser la “salvación” de Geely si llegara a un precio competitivo, y lógicamente (muy) por debajo de la línea de impuestos internos.
El Geely Emgrand X3, que iba a llegar en el segundo semestre de 2018 a la Argentina, se vende bien en Uruguay.
Claro que para eso primero se lo debe homologar, algo que demanda una inversión y varios meses de trámites. ¿Estarán los orientales (de Uruguay y de China) dispuestos a hacerlo? La marca se lo merece y los clientes que apostaron a ella, también. Ojalá haya luz al final del túnel.
1 comentario
Es una excelente marca! Los vehículos son de lo mejor qué hay por encima de autos mercosur. Tengo una Emgrand gs Executive y la verdad me sorprendió en todo. A nivel mundial no para de crecer. Es cuestión de replantear el negocio y seguir apostando al país