La dedicación y el trabajo que realizan los Bomberos Voluntarios a lo largo y a lo ancho de la Argentina muchas veces no tiene visibilidad ni reconocimiento. Y lamentablemente suelen ser noticia sólo cuando alguno pierden a alguno de sus miembros o cuando queda en evidencia la falta de recursos con los que llevan adelante su difícil tarea.
En este caso son noticia por la solidaridad que hay entre los cuerpos de bomberos a nivel mundial, en particular entre los de Estados Unidos y la Argentina; sabido es que en el país del norte hay una política de reposición constante de sus elementos, y que esos recursos no se desechan sino que se reubican y donan a quienes lo estén necesitando.
Quien lleva adelante una tarea más que destacable es Walter Cook, un bombero y rescatista oriundo de Cincinnati, Ohio, que está al frente de una fundación denominada Bomberotecnia mediante la cual pone en valor vehículos y equipos que luego dona a distintos cuarteles que visita.
En mayo, Cook estuvo en nuestro país y recorrió las provincias de Río Negro, Neuquén y Chubut para conocer cómo se trabaja, saber qué necesidades tienen y compartir sus conocimientos, ya que es instructor de Bomberos, instructor de rescate vehicular e instructor de operador de vehículos de emergencias, entre otras especialidades.
En aquella oportunidad el experto confirmó algo que comenzó en abril de 2022 con un intercambio de mensajes, y que acaba de concretarse esta semana: la donación de un autobomba para el cuartel de Bomberos de San Martín de los Andes.
Se trata de un un imponente Ford del año 1990, carrozado por la empresa especializada Sutphen, que apenas tiene 29.145 kms. Se trata del típico autobomba que se ve en las series y películas de Hollywood, un vehículo clásico con todo el equipamiento y los detalles que lo hacen una pieza única para este tipo de uso y que -en particular- cuenta con un sistema de succión de agua por bombas (ideal para abastecerse en un lago, por ejemplo) y una capacidad de almacenamiento de 2.000 litros.
Está desarrollada sobre un Ford C-8000 y cuenta con un motor Caterpillar 3208 diesel de 200 cv de potencia.
La unidad arribó al puerto bonaerense de Zárate a principios de mayo pero había que liberarla y trasladarla a la localidad neuquina por lo cual a fines de agosto, el Concejo Deliberante aprobó la otorgación de un subsidio de $2.238.500 (no reintegrable y por única vez) a la Asociación Bomberos Voluntarios de San Martín de los Andes para que pudiera hacer frente a los costos del traslado de esta unidad.
Se trata de un vehículo que prestó servicio en el cuerpo de bomberos de Park Hills, Kentucky con el número de identificación 601 -que aún conserva pintado en su carrocería- y que este martes por la noche tuvo su bienvenida en pleno centro de San Martín de los Andes con el bautismo de agua y el sonido de las sirenas, como indica la tradición.
La firma Stuphen es de Ohio (casualmente como Cook) y fue fundada en 1890 y se dedica específicamente a construir autobombas en sus propios chasis, incluidos los motores, escaleras y otros elementos, aunque también proporciona carrocerías para aplicaciones de chasis comerciales. Su competencia es la firma Pierce, fundada en 1913.
La fundación Bomberotecnia también envió un contenedor con equipamiento para distintos cuarteles de la Patagonia incluidos equipos de respiración autónoma, equipos de protección personal y cascos, entre otros.
Más allá de destacar este acto de solidaridad se debe poner el foco en los plazos de la política y en los altos costos que conlleva la logística (sobre todo en los tiempos que corren) para entidades que no cuentan con recursos propios.
La burocracia se puede entrometer incluso en algo tan sano como una donación, y es algo que desde los gobiernos se debería rever para que al menos haga su (mínimo) aporte. Y lo mencionamos porque aún falta destrabar ese contenedor que está en la Aduana.
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